El segundo día de las ponencias ofrecidas por el Instituto de Estudios Canarios fue ayer. En esta ocasión las charlas trataban sobre las series animadas para adultos, concretando en South Park, y sobre las similitudes existentes entre los wéstern del siglo pasado y la actual serie de muertos vivientes The walking dead.
Francisco pomares, quien fuese ponente el día anterior (ver aquí) se encargó en esta jornada de ejercer de moderador. Presentó las charlas como "el reino de las asquerosidades", puesto que una trataba de los desvergonzados niños que viven en South Park y que hablan de cualquier tema, incluso los tabú, sin ningún pelo de la lengua, y la otra sobre los cuerpos en vías de descomposición de The walking dead.
| Vanessa Rodríguez Breijo |
Vanessa Rodríguez Breijo, profesora de Comunicación Audiovisual en el grado de Periodismo, fue quien se encargó de hablarnos sobre las series de animación para adultos, dibujitos animados nada
inocentes y que mejor no dejar ver a los más pequeños de las casas, en una ponencia llamada South Park y otros vándalos: la venganza de los dibujos animados.
Nos puso varios ejemplos de este tipo de series, como Ren y Stimpy, claro antecesor de Bob Esponja por su tipo de humor y su estética. También nombró a los absurdos Beavis y Butt-head y a la mítica y legendaria y mítica Los Simpson, pero donde más insistió fue en South Park.
Afirmaba que este tipo de series están protagonizadas por antihéroes, unos groseros e incompetentes pero que al fin y al cabo nos hacen gracia, tal vez por el hecho de que verles fracasar nos hace identificarnos y nos reímos de ello. Pero además este tipo de animaciones esconden, aunque no es que se oculte mucho, una crítica y sátira sobre la sociedad en la que está situado el personaje.
Nos mostró mediante vídeos como estos personajes no respetan ni a personas ni a instituciones, en cierta manera tampoco respetan a los espectadores por la manera en las que tratan ciertos temas como drogas, violencia extrema y sexo sórdido. Un claro ejemplo de eso es South Park, donde tratan temas como necrofilia, donde ridiculizan a profesores y médicos, critican a los padres y siempre muere Kenny. ¿Pero por qué Kenny?¿Por qué muere en todos los capítulos y nunca se entiende lo que dice? Vanessa nos da una respuesta reveladora, por lo menos para mi, y es que Kenny es pobre. Una crítica más a la sociedad, a la que no le importa lo que le pase a los pobres ni lo que estos digan u opinen.
"¿Quién cree que alguien puede salvar al mundo? Nadie. Mejor reírnos de nuestros problemas" es la defensa que Vanessa hacía de estos dibujos, que aunque para nada son infantiles, si que tal vez nos muestra a los adultos el lado más crudo de la sociedad, de una forma satírica y que en parte nos deja viajar a nuestra infancia.
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| Lucas Morales Domínguez |
Western Dead: la frontera en versión zombi fue la segunda de las ponencias, impartida por Lucas Morales Domínguez, profesor en la Escuela Universitaria de Turismo de Santa Cruz de Tenerife.
Empezó la charla iniciándonos en el mundo de la temática zombi, nombrando a las primeras películas de muertos vivientes que se crearon; películas que si viéramos ahora, después de haber visto The walking dead nos parecerían muy cutres, películas no de serie b, sino incluso z, exagerándolo.
Pero lo importante de la intervención de Morales, y el motivo del nombre de su participación, son las similitudes que existen entre la serie de la AMC y los wéstern del siglo XX. Para ello nos presentaba las características de las películas de vaqueros y las comparaba con sucesos de la serie protagonizada por el Sheriff Rick Grimes. Un total de diez características que personalmente me asombró la claridad con la que se muestra en la serie:
- Un héroe pistolero llega montado a lomos de su caballo con el fin de imponer su ley. Cualquiera que haya visto la serie recordará una de las primeras escenas, que incluso fue cartel de la serie, de Rick entrando a lomos de un caballo y cargado con armas a una gran ciudad.
- La presencia del héroe provoca cambios sociales. Y es allá donde vaya Grimes desplaza de distinto modo al líder que haya y se pone él al frente.
- Obligación de sobrevivir a un entorno hostil. Más hostil que enfrentarse continuamente a un fin del mundo plagado de zombis no creo que pueda ser.
- Exploración de territorios inhóspitos e inexplorados. Sin poder usar las nuevas tecnologías y estando todo patas arriba, todo lugar al que llegan es por casualidad y siempre yendo con pies de plomos.
- Búsqueda de un lugar donde ser libre y vivir en paz. Algo utópico. Y tanto, solo hay que recordar la trama de Terminus, a donde los protagonistas ansiaban llegar, pero una vez allí luchaban por salir.
- La amenaza latente del ataque de los indios y la lucha con ellos para obtener territorios. Aquí indios no, pero sí zombis; y es que a cada zona que llegan tienen que hacer una limpia, siendo el ejemplo más claro la cárcel, donde se van deshaciendo módulo a módulo de los muertos vivientes.
- Los bandidos. Por que los malos de la serie no son los muertos, sino los vivos: el Gobernador, los carnívoros, los Wolf, y probablemente muchos otros que lleguen (ejem Negan ejem).
- Los que buscan aprovecharse de los demás para vivir de una manera más cómoda. Volviendo a poner de ejemplo al Gobernador
- Antihéroes bien definidos. Con un Shane que, aunque pareciera el malo, muchos se identificaban con el; incluso Lucas apunta que Rick se ha convertido en Shane, debido a que ya ha descubierto que siendo bueno y noble no se puede sobrevivir en ese nuevo mundo
- Pueblos plagados de forajidos. Volviendo a los zombis.
Una ponencia plagada de piques sanos entre Morales y Pomares sobre el género zombi, que consiguió mantener mi atención todo el rato y que finalizó con el vídeo de una escena de la serie que bien podría haber sido sacada de un western: un bar en el sur de Estados Unidos, botellas de licor y un decorado clásico, con un duelo de pistolas en el que Rick desenfunda fugazmente y se deshace de los malhechores.
Esta tarde la jornada de clausura y una mesa redonda formada por Ramón González, Víctor Conde y Manuel Díaz, que comentaré mañana en una nueva entrada.
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