17.10.15

Into the woods




Ten cuidado con lo que deseas, porque se puede convertir en realidad gracias a la magia, y la magia siempre tiene un precio.

Anoche me vi está película después de mucho tiempo queriendo hacerlo, y tengo que decir que las expectativas que tenía fueron superadas.

Me gusta que se mezclen historias, como en la serie Érase una vez (once upon a time en su título original), pero sobre todo me gusta que en esos cuentos conocidos no se profundicen, pues al fin y al cabo la historia es otra. No es necesario ver a Cenicienta y al príncipe bailar, o cómo Jack le roba a los gigantes, eso ya lo conocemos. Into the woods nos cuenta algo diferente, y cuando parece que termina con final feliz todo se desmorona. 

La frase mítica de El exótico hotel marigold "al final todo saldrá bien, y si no sale bien es que no es el final" no tiene cabida en esta historia, es completamente lo contrario. Por eso también me gusta, ya que no tiene el típico final feliz de película Disney, tiene un final raro.

Y siguiendo con las cosas que me gustan no puedo dejar de mencionar los guiños hacia los cuentos originales, alejándose de las versiones de dibujos animados y mostrándonos los aspectos más crudos de las historias, pero sin perder nunca el toque de humor.

Nacida en los escenarios de Broadway, la película ha contado con el guionista original de la obra, James Lapine, y como director a Rob Marshall, quien ya tiene experiencia en dirigir musicales con títulos como Chicaco o Nine.

Into the woods es la última película musical producida por Disney. En ella se entremezclan historias tan conocidas como Rapunzel, Caperucita Roja, Jack y las habichuelas mágicas y Cenicienta, teniendo todas el mismo escenario común: el bosque.

El filme empieza de una manera vertiginosa, casi difícil de seguir si no se es rápido leyendo los subtítulos de las canciones o se tiene conocimiento de inglés; es por ello que no entiendo muchas de las críticas que he leído que la tachan de lenta y pesada. Se empieza introduciéndole al espectador los personajes con una canción en la que cada uno muestra sus deseos, los cuales creen poder cumplir en el interior del bosque.


Cenicienta desea ir al festival que celebra el rey; Jack desea que su vaca Blanquita de leche; El panadero y su mujer desean tener un hijo; y Caperucita desea pan para su abuelita. Parecen deseos simples, pero que hará que los cinco se adentren en el bosque, haciendo que sus vidas se crucen y las historias que todos conocemos cambien drásticamente.

En la piel de Cenicienta se mete Anna Kendrick, una actriz que me sorprendió gratamente con su voz en Dando la nota. No puedo decir nada malo de su actuación, aunque sí de su personaje: ¿no le bastaba a Cenicienta con plantar una vez al príncipe que lo tuvo que hacer tres veces? Aunque viendo al príncipe... No la culpo.

Al plantado en cuestión lo interpreta Chris Pine, quien años después de participar en Princesa por sorpresa 2 vuelve a pertenecer a la monarquía. Un príncipe que, como él mismo dicen, le criaron para ser encantador, no sincero; un ligón sin escrúpulos, vamos. Y sin embargo da un toque de humor que hace imposible odiarle. Escena épica la que comparte con su hermano en la ficción; una canción de enfrentamiento que nada tiene que ver con la batalla que puedan tener Jean Valjean y Javert, pues lo único por lo que "discuten" los hermanos es por quien sufre más agonía debido al amor que sienten, una escena tan cutre que tiene que estar hecha adrede y que la hace increíblemente buena.

El otro príncipe es Billy Magnussen, un desconocido para mi pero cuya interpretación me encantó. Me repito sobre la escena con su hermano de la agonía, épica. Y su enamorada no es otra que Rapunzel. He de decir que lo real de su cabello me alucinó. La actriz que ponía voz a la dama de largos cabellos es MacKenzie Mauzy. Poco puedo decir de esta pareja, salvo que su final es casi tan feliz como su principio.

Meryl Streep es la malvada bruja de la historia. Su deseo es volver a ser tan bella como antes. Su personaje es tal vez el punto de conexión entre todos (a parte del bosque): el padre del panadero le robó las habichuelas que posteriormente pertenecerían a Jack, y a parte hace de madre de Rapunzel. Un poco culebrón la película. ¿Pero qué decir de tan grande actriz? Si ya brilló en Mamma mia!, el personaje de la bruja no lo podría haber interpretado nadie mejor.

Es la bruja la que debido a un hechizo que lanzó al padre del panadero, impide que este pueda ahora ser padre. Pero toda maldición se puede romper, y para ello se necesitan cuatro "ingredientes": la vaca, blanca como la leche; la capa, roja como la sangre; el pelo, amarillo como el maíz; y el zapato, puro como el oro. ¿Aún no se ven las conexiones? Los panaderos son interpretados por Emily Blunt y James Corden, los cuales realizaron una gran actuación, y cuya historia tiene un giro inesperado en la segunda mitad de la película.

En la historia nos encontramos también con el cuento de Caperucita. Lilla Crawford interpretó en 2012 en Broadway a Annie, y da el salto a la gran pantalla como la niña de la caperuza roja, una glotona que quiere hacer siempre caso a los consejos de su madre y abuela, aunque a veces la curiosidad le puede. En su camino por el bosque, camino a casa de la abuelita, se encuentra con el lobo, un conocidísimo Johnny Depp al que no me hubiera importado ver más durante el filme, pero tampoco es que la historia del cánido diera para mucho más.

El otro alevín de la historia es Jack, al que le da vida Daniel Huttlestone. Tengo que confesar que este niño ya me enamoró en Los Miserables, y puedo confirmar que no ha perdido su encanto. En cierto modo Gavroche me recuerda a Jack: noble, curioso, travieso como debe ser un niño y, sobre todo luchador. Gran interpretación del joven que aunque ha crecido, se le sigue reconociendo.

Personalmente no le encuentro ningún fallo a la película, aunque en varios foros he visto más comentarios negativos que positivos. Pero los profesionales "están conmigo", sino no hubiera sido tan nominada y galardonada, sobre todo lo magnífica Meryl Streep. Vestuario perfecto, escenarios de ensueño, historia bien hilada para mi gusto y música genial.

Aconsejo cien por cien verla a aquel que le guste los cuentos clásicos, las mezclas raras y los musicales. Tal vez por eso me haya encantado.

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